El entrenamiento funcional tiene como prioridad estimular diferentes estructuras corporales de una forma programada, sistemática y pertinente respecto a las cualidades físicas del participante. En este orden de ideas propende por el mejoramiento del aparato cardio respiratorio, el aparato cardiovascular, el fortalecimiento de las estructuras musculares y los beneficios a nivel intra- celular que ya se encuentran ampliamente documentados. En concordancia es necesario conocer el estadio inicial desde las capacidades fisiológicas del individuo, para prescribir el volumen de la carga, la intensidad, los periodos de descanso y el tipo de ejercicios a desarrollar.
El Cross Fit se considera como una opción interesante a la hora de generar un proceso motivacional frente al movimiento ya que propende por el desarrollo de herramientas emocionales tales como: perseverancia, paciencia, tolerancia al error, auto-suficiencia y auto regulación. En la misma linea para su abordaje en el contexto escolar este tipo de ejercicios requiere diferentes variables para adaptarlo a estudiantes de grado décimo y once. En la escuela se aplica desde el ámbito biomotriz ya que busca estimular las diferentes capacidades corporales desde el aspecto fisiológico, psicológico y social; por lo tanto su intencionalidad frente a lo competitivo pasa a un segundo plano. Esto permite que en edades tempranas se pueda generar un trabajo funcional, teniendo en cuenta las realidades contextuales y los intereses de los niños.
Lic Juan Carlos Piñeros Suarez.
Es muy grato e importante en contrario este tipo de herramientas que desde lo físico ayuda a encontrar la razón de ser, desde los componentes emocionales incluyendo el error. Gracias por plantear esta opción para liberar al ser humano que en la escuela estamos buscando.
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